Alimentación y salud mental 🧠

La alimentación y el estado mental están íntimamente relacionados. La comida que comemos afecta directamente a nuestro cerebro y, por tanto, a nuestro estado de ánimo. Los nutrientes que ingerimos tienen un impacto directo en la forma en que nuestro cerebro se desarrolla, se mantiene y funciona.

Por ejemplo, se ha demostrado que la falta de vitamina B12 puede causar depresión. La vitamina B12 es esencial para la producción de neurotransmisores, que son los mensajeros químicos que transmiten información entre las neuronas.

Si hay una deficiencia de vitamina B12, esto puede afectar la forma en que se transmiten los mensajes en el cerebro, lo que puede conducir a la depresión. De manera similar, se ha demostrado que el omega–3 es esencial para un buen estado mental.

El omega–3 es un ácido graso que se encuentra en el pescado, las nueces y las semillas. Los ácidos grasos omega–3 son esenciales para la formación de las membranas celulares y también juegan un papel importante en la transmisión de los mensajes entre las neuronas.

Una dieta equilibrada que incluya una variedad de alimentos saludables es la mejor manera de asegurarse de que estamos obteniendo los nutrientes esenciales para un buen estado mental.